sábado, marzo 27, 2010

Podrán imitarnos, pero igualarnos, jamás: Imperdible nota del diario español Marca, sobre nuestra hinchada

A continuación, les mostraremos la nota que publicó el prestigioso diario español Marca, sobre nuestra inigualable hinchada:

Cuando uno va con 'La Doce' a la Bombonera da igual si le ha dejado la novia, si no tiene 'laburo' (como le dicen por aquí al trabajo) o si mañana tiene que madrugar para descargar palés de dulce de leche. Cuando uno va con 'La Doce' no se le ocurre meterse con un jugador de Boca, porque lo sacarían de la grada en trocitos. Esto no es sentarse en el Bernabéu a meterse con Guti o a silbar a los 'Diarrás'. Cuando uno va con 'La Doce', tiene que animar. Y punto. "O 'venís' a alentar, o no venís", te dicen.

Así que tres horas antes del partido los bosteros ya van cantando caminito de la Bombonera: "¡Olé, olé, olé, olé, olé, olé, olá! ¡Olé, olé, olé, olé, cada día te quiero mas! ¡Yo soy bostero, es un sentimiento, no puedo paraaaaar!". Suenan como un orfeón mientras caminan, saltan y agitan rítmicamente los brazos. Son la marea azul... y amarilla.
compiten a muerte para ver quién grita más, quién salta más, quién es más de Boca

Desde que entran al estadio, los de 'La Doce' cantan a pleno pulmón, ocupando las tres bandejas (anfiteatros) del fondo sur de la Bombonera. Nunca he visto un espectáculo semejante en un estadio de fútbol. Todos uniformados con su camiseta xeneize -menos los que andan arengando a pecho descubierto- cantan como si fuera el último Superclásico de sus vidas, aunque aún quedan dos horas para el partido."Yooooo te sigo a todas partas donde vas, caaaaada vez te quiero más. Vaaaaamos, vamos los xeneizes, vamos a ganar". La canción se repite incesamente durante 15 minutos. Sin pausa. Sin bajar la intensidad. Sin respiro. Noto cómo se me empieza a erizar el vello de los antebrazos y el de la nuca. El suelo se mueve. Sí, se mueve. Y eso que aún no ha empezado el partido.
El diluvio no cesa. 'La Doce' saca un banderón gigante que cubre las tres bandejas del fondo sur de la Bombonera. "Como no somos los únicos, decidimos ser los mejores. Jugador número doce", dice. Cuando sale River los cimientos de la Bombonera se remueven. Cuando sale Boca, es el acabóse. Serpentinas, papelillos, bengalas, petardos, humo... Todo el estadio recibe a su equipo cantando a coro. Los hinchas de 'La Doce' compiten a muerte para ver quién grita más, quién salta más, quién suda más, quién se desvive más, quién se sube más alto a la valla, quién es más de Boca. Es una locura colectiva.



Link: http://www.marca.com/2010/03/22/futbol/futbol_internacional/1269213413.html