Lamentablemente no pudimos conseguir el milagro, el partido ante las Chivas se suspendió por incidentes cuando estábamos 0-0 (restaban once minutos para el término del encuentro), y esto quiere decir que quedamos eliminados en los 4º de final de la Copa Libertadores, ya que en la ida caímos 4-0.

Ni siquiera la presión de la gente motivó a nuestros jugadores, la hinchada copó la Bombonera; recibió al equipo como en una final del mundo; alentó sin parar en todo momento, pero desgraciadamente no alcanzó.

Nuestros jugadores pusieron más empuje que juego y a pesar de haber creado algunas chances de gol, la goleada parecía lo que finalmente fue: una utopía.

Cuando ya el milagro era imposible de conseguir, llegó el descontrol: Palermo se peleó con un mexicano y ambos futbolistas fueron expulsados, esa situación enfureció a los hinchas y uno de ellos saltó al campo para agredir al jugador que le habían sacado la roja. Esto no fue todo, vergonzosamente también recibió una agresión de un auxiliar del cuerpo técnico, conocido como Cacho Loustau, que vaya a saber que hacía ahí.

La gota que motivó la suspensión del encuentro fue la gran cantidad de proyectiles que caían desde las tribunas, principalmente hacia el arquero visitante que estaba ubicado en el sector que ocupa la Nº 12.

El árbitro, luego de esperar varios minutos, intentó reanudar el juego pero las agresiones continuaban y no le quedó otro remedio que suspender el cotejo, cuando todavía faltaban poco más de 10’ para su finalización.

Sinceramente la mayoría de los simpatizantes Xeneizes creo que esperábamos otro final, no podemos justificar los incidentes ocasionados, como así tampoco las provocaciones de los jugadores mexicanos y menos aún la de su presidente, que en la previa hizo declaraciones fuera de lugar que calentaron el clima en la Bombonera.

Esta eliminación duele mucho más, si nos ponemos a pensar que también significa que no participaremos en la edición de la Libertadores 2006, ya que estamos muy lejos en la tabla clasificatoria del torneo local.

Como buenos hinchas de Boca, debemos aceptar que no estamos pasando un bueno momento deportivo y ahora más que nunca tenemos que llevar orgullosos los colores azul y oro y demostrar que somos los más fieles del planeta, porque como dice la canción: “Aunque ganes o pierdas no me importa una mierda, sigo siendo Bostero porque a Boca, lo quiero”.

Resumen del partido:

Boca 0: 1-Roberto Abbondanzieri; 4-Baiano, 2-Rolando Schiavi, 3-Claudio Morel Rodríguez, 20-Gerardo Bedoya; 8-Diego Cagna, 5-Raúl Alfredo Cascini, 23-Fabián Vargas; 7-Guillermo Barros Schelotto, 9-Martín Palermo, 16-Marcelo Delgado.
Suplentes: 12-Ezequiel Medrán, 15-José María Calvo, 6-Anibal Matellán, 29-Pablo Ledesma, 18-Matías Donnet, 23-Andrés y 17-Rodrigo Palacio.
DT: Jorge Benítez.

Chivas 0: 24-José de Jesús Corona, 4-Héctor Reynoso, 4-Johnny García, 8-Francisco Rodríguez; 6-Rafael Medina, 15-Manuel Sol, 23-Juan Pablo Alfaro, 11-Ramon Morales; 7-Adolfo Bautista; 17-Francisco Palencia y 9-Omar Bravo.
Suplentes: 12-Alfredo Talavera, 19-Johnny Magallón, 14-Alejandro Vela, 21-Oribe Peralta, 10-Alberto Medina, 16-Edwin Borboa y 22-Cristian Ramírez.
DT: Benjamín Galindo.

Goles: No hubo
Cambios: ST Guglielminpietro X Vargas (B) y Medina X Bravo (Ch), 15m Palacio X Delgado (B), 23m Ledesma X Cagna (B).
Amonestados: Bedoya, Schiavi, Barros Schelotto (B), Corona, Bravo, Medina, Rodríguez (Ch).
Expulsados: ST 30m Palermo (B) y Bautista (Ch).
Arbitro: Martín Vázquez (Uruguay).
Cancha: Boca.