
El cotejo arrancó bastante flojo, pero tres goles en siete minutos le dieron un poco de emotividad y entretenimiento.
La apertura del marcador la consiguió el Mellizo (17’), quien definió muy bien ante la salida del arquero, luego de haber recibido una gran asistencia de Palermo.
A los 22’ nos empataron, tras un cabezazo proveniente de un tiro libre del sector izquierdo. Por suerte, dos minutos más tarde conseguimos el 2-1, gracias a un error grosero del arquero local (salió muy lejos de su meta) y a un excelente toque sutil de Guillermo (centro de Marino).
En el complemento Cruz Azul salió decidido a buscar la igualdad y lamentablemente lo consiguieron a los 11’, luego de un disparo cruzado de López desde afuera del área, que se metió junto al palo derecho de Migliore.
A esa altura, el juego dejó de ser amistoso, ya que se vio mucha pierna fuerte y en algunas oportunidades con mala intención.
Sin lugar a dudas que en la segunda mitad bajamos considerablemente el rendimiento, los locales nos llegaron con más claridad y a nosotros nos costó mucho crear situaciones de riesgo.
A pesar de los intentos, ninguno de los dos equipos sacó diferencias y por tal motivo el cotejo se definió por tiros desde el punto penal, donde fuimos más precisos y ganamos 4-2 (en nuestro conjunto anotaron: Palermo, Krupoviesa, el Cata Díaz y Ledesma, mientras que ellos tiraron afuera el segundo remate y Migliore atajó el cuarto).
Antes de regresar a Buenos Aires, debemos disputar dos compromisos más en México, uno será este jueves ante Atlas (se modificó, ya que estaba previsto para el miércoles) y el otro será el sábado frente a Tigres.
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