El fútbol argentino da para todo, ya que en el entretiempo de Gimnasia de La Plata 1 – Boca 0, el árbitro del encuentro Daniel Giménez decidió suspender el pleito porque fue amenazado de muerte por ¡¡¡el presidente!!! del club platense, Juan José Muñoz.

Es increíble lo que hizo la autoridad máxima del Lobo, debido a que el arbitraje hasta ese momento no había perjudicado en ningún momento a su equipo, es más, el dueño de casa llegó al 1-0 tras un penal inexistente y debió quedarse con 10 hombres porque el autor del gol tenía que haber sido expulsado por doble amonestación, ya que su festejo fue desmedido.

No tuvimos un buen desempeño en los 45 minutos que duró el encuentro, generamos pocas situaciones de riesgo y por momentos perdimos el control del balón.

Los triperos salieron decididos a jugar con pierna fuerte y eso se vio reflejado en la cantidad de amonestados que tuvieron en tan sólo un tiempo (6).

En una jugada aislada el árbitro vio un empujón dentro del área y cobró penal, el cual fue convertido por el delantero uruguayo Silva (29’).

Ese fue el resultado con el que ambos equipos se fueron al descanso, el resto ya se lo contamos anteriormente.

Ahora el tribunal de disciplina deberá tomar una decisión al respecto, veremos si el partido se reanudará o sin nos darán el encuentro ganado por el hecho gravísimo que ocurrió.